Experiencia educativa en las montañas del norte de Suiza

Imagen Rosa Cortés

Me llamo Rosa Cortés y actualmente trabajo como profesora de idiomas en un colegio público de Madrid. Mi estancia profesional en el Kantonsschule am Burggraben no ha podido ser más enriquecedora. Inmersa desde el primer momento dentro del claustro tuve la oportunidad de estar presente en la inauguración del presente curso escolar. Además de visitar varias clases de idiomas extranjeros, en especial la enseñanza del español y el inglés como lengua extranjera, el profesorado me dio la oportunidad de impartir algunas sesiones, con lo que la experiencia resultó ser una inmersión autentica en el sistema educativo….¡aunque dos semanas se hace un poco corto!

Sankt Gallen es un cantón de habla alemana que es receptor y emisor de alumnos de otros cantones del país en los que se habla alguno de los otros idiomas del país. Fue muy interesante conocer a alumnos que venían de cantones de habla francesa, por ejemplo. Ellos, apesar de haber recibido clases de alemán allí, tenían que “luchar “ por entender y hacerse entender en el dialecto alemán que se habla en Suiza para poder seguir las clases. Y, sin embargo, el espíritu de sacrificio y la conciencia de ser un país con varias lenguas oficiales les hacia asumir de buena gana una especie de obligación nacional de ser capaces de comunicarse en al menos dos lenguas del país aparte de en alguna otra lengua extranjera ya fuese español, inglés o chino.

El Kantonsschule tiene programas de estancias en países de los idiomas extranjeros que se estudian y cada alumno recibe una ayuda económica por parte del cantón ( por ejemplo, 100 francos por una estancia de una semana en España) para poder costearse parte del viaje. Además, todos los profesores que se especializan en la enseñanza de lenguas extranjeras deben obligatoriamente antes de graduarse pasar un periodo de seis meses en un país cuya lengua extranjera pretendan enseñar.

Un punto que me gustaría destacar es el ambiente en las clases. Los alumnos muestran gran respeto por el profesorado. De hecho, los profesores son uno de los colectivos profesionales mejor valorados por la sociedad en el país helvético.

La experiencia ha sido muy enriquecedora y desde aquí quisiera agradecer la oportunidad que se me ha brindado por parte del Ministerio de Educación, al personal del INTEF, a Rosario Outes Jiménez, así como a las labores de gestión realizadas por María Jose Larraz de la Embajada española en Berna y a los profesores del Instituto suizo: Cinthia Palma, Christian Gerber, Ralph  Sonderegger y Marina Della Costanza y al rector Dr. Marc König.