En el mes de octubre, concretamente desde el 16 al 27, recibimos en nuestro centro IES Sa Serra de Ibiza, la visita de la profesora de español Ainhoa Abad Valero. Esta profesora ejerce su labor en un centro de enseñanza secundaria nivel bachillerato en Francia. El centro del cual proviene se llama Lycée Eugène Henaff y se encuentra en las afueras de París. La misión de esta persona era observar el funcionamiento de un centro en España y enriquecerse de diferentes prácticas educativas.
En primer lugar me gustaría calificar la experiencia como altamente positiva ya que nos ha permitido valorar los dos sistemas de enseñanza y hemos podido por ambas partes enriquecernos de experiencias positivas que nos ayudarán en nuestra labor docente, del mismo modo que hemos podido recibir crítica constructiva de nuestra labor para poder mejorar.
La labor de observación tiene una consideración muy distinta en Francia y en España. En el país galo están acostumbrados a ser observados en su labor diaria por parte de compañeros así como por parte del inspector. Ellos están muy habituados a esto y además tienen unas pautas fuertemente establecidas para hacerlo. Mientras tanto, en España, no tenemos costumbre de recibir observadores y tampoco sabemos como hacer la labor de observador de una manera clara y pautada.
El intercambio con los alumnos en España ha sido muy positivo ya que los alumnos españoles están más habituados a tratar con los profesores de una manera muy cercana mientras que en Francia la relación alumno/profesor es fría y distante. En cuanto al intercambio con el equipo pedagógico ha sido también más que correcto ya que se le ha permitido a nuestra compañera visitante entrar en clases de materias diferentes y así ver prácticas bien diferenciadas.
El aspecto negativo que destacaría de esta experiencia profesional es que se deberían establecer las pautas de la estancia antes de iniciarla, es decir, cómo debe ser exactamente el proceso de observación por parte del profesor visitante, ya que en nuestro caso nos hemos dado cuenta que la interpretación que hacíamos del proceso era diferente. Evidentemente, podríamos destacar muchos más aspectos positivos que negativos y a grandes rasgos he de recalcar, como he dicho más arriba, que la experiencia ha sido altamente gratificante y que se debería empezar a hacer y recibir observación por parte de nuestros propios compañeros ya que es una manera de mejorar la labor docente y por supuesto apoyo fuertemente los intercambios profesionales con otros países.
La profesora visitante y yo ya teníamos relación anterior ya que tenemos un proyecto puesto en marcha desde el curso pasado a través de la plataforma etwinning y este intercambio nos ha permitido afianzar lazos además de concretar muchos datos en relación a este proyecto.
Para concluir, me gustaría destacar la importancia de hacer este tipo de experiencias especialmente en el ámbito de la enseñanza de las lenguas extranjeras ya que permite pasar estancias en el país extranjero y poner en práctica la lengua, además de todo lo citado con anterioridad, el gran valor que tiene el hecho de observar a un compañero para valorar su tarea y para aprender de él, y por supuesto ser observados para que podamos mejorar todos.
