Kinross High School, Kinross/Perth, Escocia (Reino Unido)

 

“If you talk to a man in a language he understands, that goes to his head.  If you talk to him in his language, that goes to his heart” – Nelson Mandela

 

Me llamo Blas Moreno y soy profesor de inglés en el IES Generalife de Granada. Mi estancia se ha desarrollado del 10 al 24 de marzo en Kinross High School, en una localidad escocesa en el condado de Perth y Kinross. Mi visita ha sido provechosa para mi práctica docente porque me permitió observar diferentes formas de abordar la enseñanza de las lenguas. También he  comprobado cómo los espacios y el tiempo se pueden organizar en torno al alumnado.

Cada profesor comienza a las 8.45 con 10 minutos de registro dando la bienvenida e informando sobre actividades diarias. Las  clases comienzan a las 8.55 y duran 50 minutos. Después de la segunda clase hay una pausa de 10 minutos y tres clases más tarde hay 40 minutos para almorzar y dos horas más de clase, terminando el día a las 15:40. Se come en una moderna y funcional cantina.

He asistido a clases de idiomas e inglés, bajo el departamento de Modern Languages. Las aulas son funcionales, mobiliario ligero y llenas de material de trabajo del alumno. El sistema educativo escocés valora el esfuerzo y muestra el resultado de esa dedicación.  Aulas  decoradas con proyectos, posters e infografías que estimulan un aprendizaje significativo y centrado en el alumno. Las clases de idiomas de cursos básicos pueden tener 25 alumnos, en niveles altos el número baja. Esta ratio multiplica las posibilidades de aprendizaje, se trabaja en equipo cooperativa y distendidamente. Ayudé con el examen de expresión oral y comprobé un excelente nivel. La clave es la agrupación de contenidos en grandes temas trabajados creativa e intensivamente. Pueden ser guiados o libres pero incluyen investigación, análisis crítico y opinión personal del alumnado.

Otros departamentos trabajan también haciendo la asignatura accesible y práctica. El de historia implica al alumnado con talleres sobre monedas. El de arte es valorado por sus atractivas actividades. Siguen un temario, pero prima el aprendizaje significativo y la involucración. La clave es la creatividad y un proyecto compartido y liderado por el claustro.

Mencionaré el trabajo del departamento de orientación que, además de realizar labores de detección y apoyo de necesidades, ofrece asistencia a alumnado con otros trastornos como anorexia, bulimia, ansiedad, dislexia, discalculia, TDHA, TEA, bullying y apoyo LGTBI.

Animaría a participar en este programa a docentes con inquietud de aprender e innovar. A mí me ha ayudado a comprobar que los profesores nos enfrentamos a retos similares independientemente del país, pero también que los matices existentes ayudan a definir y cambiar realidades que marcan la diferencia.