Mi estancia en el Edgbaston High School, Birmingham, Reino Unido

He permanecido en el Edgbaston High School for girls durante dos semanas. Es el instituto inglés donde hace unos años terminó su Bachillerato la Premio Nobel de la Paz, Malala. ¿Recodáis a Malala? La joven activista paquistaní que sufrió una agresión en su país y fue traslada aquí, al hospital de Birmingham para curar sus heridas.

El Edgbaston High School for Girls es un centro privado inglés, de Birmingham, donde imparten desde la educación primaria hasta la educación secundaria y High Levels, es decir, donde las alumnas pueden estudiar toda su etapa escolar. Es un gran centro con unos 100 profesores y unas 2000 alumnas. El horario del centro es de 8.15 de la mañana hasta las 15.55 los lunes, martes y miércoles y hasta las 15.20 los jueves y viernes. Además de las clases, en el centro se organizan actividades extrescolares deportivas y artísticas, entre las que cabe destacar el programa de “enrichment” curricular de las alumnas de Bachillerato. Como se trata de un centro privado, el grado de implicación de las familias de las alumnas es alto, aunque esto no garantiza la motivación de las mismas puesto que, a veces, esto no va emparejado.

¿Qué he hecho allí? He realizado una estancia profesional del MEFP durante dos semanas. ¿En qué consiste? El programa de Estancias Profesionales del MEFP permite pasar dos semanas de observación profesional en un centro de la Unión Europea con dos objetivos: mejorar las competencias lingüísticas del profesorado y también las profesionales.

Hace tiempo que conocía el programa, pero como soy profesora de Lengua Castellana y Literatura, nunca había podido acceder a él. Hasta la convocatoria actual, solo los profesores de idiomas o los profesores de ANL de las secciones bilingües podían solicitarlo. Es una situación que siempre consideré injusta y me alegro de que el Ministerio haya rectificado. Desde este año, cualquier profesor tiene la posibilidad de vivir esta experiencia.

Una vez que salió la convocatoria, reuní mis méritos y busqué centros ingleses, que era el país que me interesaba, para pedir una carta de invitación. Para ello, además de intereses personales, utilicé uno de esos listados de los 100 mejores centros de UK que circulan por la red. Era una apuesta arriesgada, pero he comprobado que no defraudan.

Entre esos centros los había públicos y privados, pero he de decir que solo contestaron a mi solicitud los privados. Esto último me interesó. Ya había tenido la experiencia de hacer una observación profesional en un centro público inglés, a través del programa ERASMUS+, y vi la oportunidad de conocer el sistema de centros privados de este país.

Estas dos visiones, me dará un completo conocimiento del sistema educativo inglés.

Llegué al centro con un “completísimo horario” que había organizado para mí, mi profesor de contacto, Mr. Flox, Jefe del Departamento de Español del centro.

Desde el primer minuto de mi estancia aquí noté la amabilidad de toda la comunidad, la perfecta organización, y el buen ambiente. Aunque no todo es color de rosa, que también tienen sus “problemillas” y sus “quejas”, en general, se respira buen ambiente y un fuerte sentimiento de pertenencia a esta comunidad.

Muy interesante es observar sus clases de idiomas, pero lo es aún más observar las clases de aquellas asignaturas que, o bien nosotros no tenemos o, si las tenemos, no son habituales en un centro público, que son los que yo conozco. Me refiero a las clases de Diseño Textil, de Alimentación y Nutrición. He visto también clases de Historia de las Religiones y las de Biología, de Matemáticas, etc. De esta manera, me he hecho una idea bastante profunda sobre su contenido curricular.

Además de la observación de las clases, he tenido un horario muy completo de entrevistas con los profesores que tienen distintos cargos en el centro. Desde la directora, Miss Weeks, pasando por las vicedirectoras, jefes de estudios, coordinadores de áreas, jefes de departamento, profesor encargado de las actividades extraescolares, y otros cargos sin equivalencia en nuestro sistema, como Pastoral Head, o Staff Wellbeing.

En el centro hay muchos recursos, entre ellos, los digitales. Todas las alumnas y todos los profesores tienen y usan un ipad, en casi todas las aulas hay una pizarra digital interactiva, que se usa como recurso habitual para impartir las clases.

Esto me está sirviendo para reflexionar cómo en España, por lo menos en mi comunidad, somos capaces de sacar adelante un sistema educativo sin tantos recursos ¡Qué mérito tenemos!

Además de esta reflexión y, como era previsible, he hecho muchas más que ocupan muchas páginas de mi cuaderno de campo; he tomado miles de notas, he grabado las entrevistas, hecho unas cuantas fotos. Creo que todos los profesores deberíamos tener, al menos, una semana como esta en un centro europeo y otra de lo mismo en un centro español, podría ser obligatorio en nuestro período de prácticas, bien del Máster o bien de prácticas como funcionario.

Aunque nuestro programa de formación del profesorado no lo contempla, sí que de manera individual y particular podemos hacerlo. En España, hablo de Andalucía que es lo que conozco, tenemos desde el año pasado el PROGRAMA DE ESCUELAS MENTORAS y fuera de España, tenemos este programa de ESTANCIAS PROFESIONALES del MEFP, y el programa ERASMUS + KA101. Pienso que reuniendo y combinando estos programas, un profesor puede completar muy bien este proceso de formación, aprender de los demás, de manera práctica, en su propio contexto. Creo, por último, que pasamos mucho tiempo “echando en falta “recursos que la Administración Educativa debería darnos en lugar de conocer y difundir lo que sí nos ofrece. Yo no puedo estar mas que agradecida por la oportunidad que estoy teniendo en los últimos cursos de poder participar en estos tres proyectos que menciono y que han supuesto para mí un verdadero impulso en mi carrera profesional.

Aunque no he encontrado métodos innovadores en las aulas, sí que llama la atención la exhaustiva planificación docente de los profesores que tienen organizadas las clases minuto a minuto, la mayoría de ellas de una forma dinámica y sin descanso, en cuanto a que el tiempo de clase está ocupado de principio a fin. En este aspecto me sorprende la distribución horaria, las clases son de 35 o de 70 minutos. Las clases de 35 minutos se pasan rápido y son muy dinámicas, se emplean sobre todo para refuerzo y práctica de los contenidos explicados en aquellas de 70 minutos que permiten un desarrollo teórico mucho más profundo. Como he visto gran variedad de materias, Idiomas, Matemáticas, Historia, Biología, Religión, etc., he visto también gran variedad de dinámicas de aula difíciles de resumir aquí.

Mi conclusión general en cuanto a la comparación de ambos sistemas educativos es que ellos tienen una mejor organización horaria, con descansos de al menos 15 minutos cada dos sesiones de clases. Esto facilita el descanso y mejora el rendimiento de los alumnos. Además, su contenido curricular es más concreto que el nuestro, la división de sus contenidos en cada curso/nivel es más asequible, menos contenidos estudiados con mayor profundidad. Por último, algo que me ha gustado mucho y creo que es un práctica de éxito es que en todo el centro se apuesta muy fuertemente por el desarrollo personal y autónomo de los alumnos, se favorece la organización de actividades comunes a todo el centro, llamadas “asambleas” organizadas casi en su totalidad por las alumnas, en las que se fomenta la creatividad, la expresión oral, el trabajo en equipo y el sentimiento de pertenencia a la comunidad.

La estancia profesional en el Edgbaston High School for Girls, ha supuesto para mí completar el conocimiento que tenía del sistema educativo inglés. A través del programa ERASMUS+ tuve una experiencia similar en un centro público y ahora he podido conocer un centro privado. Además, estar dos semanas frente a la otra estancia que es de una sola, permite conocer esa comunidad mucho más en profundidad.

El conocimiento adquirido tanto profesionalmente como lingüísticamente, es inmenso. Profesionalmente, te reafirma en tu experiencia docente, observas cómo otros profesores se enfrentan a los mismos problemas que tú e, incluso, los resuelven de la misma manera que tú. Y eso sirve para reafirmarte en tu práctica docente. Junto con esto, aprendes muchas cosas más, formas de dirigirte a los alumnos, maneras de organizar la clase que no habías pensado, optimización de recursos, rúbricas de evaluación, decoración de las clases, planificación, distintas maneras de fomentar la lectura. En cuanto al desarrollo de mi competencia lingüística, siento que esta ha mejorado bastante. Una experiencia tan intensiva como esta, es equiparable a todo un curso de estudio del idioma. Por una parte, aprender todo el vocabulario necesario para poder entrevistarte con los miembros de la comunidad educativa. Cada noche tenía que preparar las entrevistas del día siguiente y repasar las listas de vocabulario que me había confeccionado para ello. El ejercicio de listening en la observación de las clases, que es constante. Las conversaciones improvisadas con los profesores en la sala de profesores o durante el almuerzo, en el comedor. Participo desde hace 4 años en el proceso de internacionalización de mi centro y mi nivel de inglés ha aumentado de B2 a C1, pero todos somos conscientes de que, si no practicamos, nuestro nivel de inglés se estanca o se pierde. Esta estancia me ha supuesto un gran “empujón” en ese propósito de mantener mi nivel de inglés y mejorarlo, en lo posible. Y también, me sirve para motivar a mi alumnado porque cuando les cuento mis experiencias, manifiestan sus ganas de aprender inglés para poder hacer lo mismo que yo, viajar y conocer otros sistemas educativos, de participar en los intercambios lingüísticos que se ofertan en nuestro centro y que han surgido de programas como este.