ESTANCIA PROFESIONAL EN EL AGRUPAMENTO DE ESCOLAS AFONSO DE ALBURQUERQUE, GUARDA, PORTUGAL

Mi nombre es María Montes, soy profesora de portugués lengua extranjera en dos IES de Secundaria de Ciudad Rodrigo, Salamanca. Desde hace varios años participo o coordino diferentes proyectos con escuelas portuguesas, pero nunca había tenido la oportunidad de conocer cómo trabajaban en el país luso in situ. Mi estancia de dos semanas, del 7 al 18 de marzo, me ha permitido conocer bastante bien cómo es una escuela del interior de Portugal y, gracias a la excelente acogida que he tenido, he podido observar desde varios ángulos cómo es el funcionamiento de un «agrupamento de escolas” portugués.

Al tratarse de un “Agrupamento de escolas” cada agrupación tiene diferentes centros asociados. La mayor parte del tiempo de mi estancia ha transcurrido en lo que se llama la “sede” o centro principal, que es el mayor centro de la corporación y desde dónde se centraliza todo.

Durante mi estancia he participado en diferentes reuniones (de departamento, de dirección, de atención a padres, de la carrera docente…); he visitado el centro de Recuros TIC para Educación Especial y el Centro de Formación del Profesorado; he presenciado actividades de la semana de lectura en el centro escolar de 5º y 6º de primaria; he tenido la suerte de coincidir con la visita-intercambio de un centro de primaria de Ciudad Rodrigo durante mi estancia; he participado en las clases de historia de un grupo de 4º de ESO y también de portugués lengua materna en 1º y 2º de ESO y, por último, pero lo más satisfactorio de mi estancia, he impartido clases culturales en español a alumnos de 4º ESO y de 1º Bachillerato.

Esta estancia me permitió conocer las similitudes y diferencias del sistema educativo portugués. La principal diferencia entre ambos sistemas educativos es, sin lugar a duda, el tema horarios, tanto de alumnos como de profesores.  Los horarios de los diferentes grupos y niveles era completamente diferente de unos a otros, pudiendo tener días de hasta ocho horas de carga lectiva y otros dos o tres y, además,  en horario partido que oscilaba entre las 8:30 y las 17:40.  Los profesores podían tener jornadas de trabajo de cuatro días semanales, ya que a partir de los 50 años se van reduciendo las horas lectivas en dos horas cada cinco años y los profesores coordinadores podían disfrutan de una media de 3 horas de reducción horaria, entre otras cosas asociadas a la carrera docente, que es muy diferente.

Desde el punto de visto formativo solo puedo decir que es una experiencia altamente recomendable. Además de la profundización en la lengua y la cultura portuguesa, que es un plus muy grande para perfeccionarme como profesional de la materia, esta estancia me ha permitido aprender y compartir experiencias, estrategias y actividades con los compañeros que me han acogido en sus clases y departamentos que no tiene precio.