Estancia profesional en el ROC Da Vinci College de Dordrecht en Países Bajos

Me llamo Marta María Hernández Toledo y soy profesora de secundaria en el IES Don Bosco de Albacete de la especialidad Organización Proyectos de Fabricación Mecánica, jefa del departamento Instalación y Mantenimiento y Coordinadora de proyectos Erasmus.

He realizado una estancia profesional en Países Bajos entre el 9 y 22 de mayo de 2022 en el centro regional de Formación Profesional Da Vinci College en la ciudad de Dordrecht. Esta ciudad se encuentra a 25 km al sureste de Rotterdam y cuenta con unos 119000 habitantes.

La ciudad es muy accesible y una gran mayoría de la población va en bicicleta. El tren de cercanías (Sprinter) tiene una amplia oferta de horarios y frecuencia para conectar todas las zonas del país. La ciudad de Dordrecht también tiene autobuses acuáticos (Waterbus) con el que puedes ir tanto a los famosos molinos de viento de Kinderdijk como a Rotterdam y Amsterdam, entre otros muchos sitios. Os aconsejo que obtengáis la tarjeta de transporte OV-Chipkaart para vuestros desplazamientos.

Este centro educativo es de carácter urbano. Forma parte del “Learning Park Dordrecht”, donde 9 edificios, construidos de materiales diferentes, se conectan por patios y corredores y albergan a unos 5000 estudiantes. Es muy peculiar el diseño arquitectónico de los edificios. Os animo a visitar su página web para que disfrutéis de su estética.

Es conocido por desarrollar un proyecto líder en educación innovadora en los Países Bajos, pues integra, además de las aulas de formación teórica y práctica, a un total de veinte empresas donde los estudiantes pueden hacer sus prácticas laborales de alguna de las especialidades impartidas en el centro. También dispone de una bolsa de empresas para las prácticas del resto de especialidades.

Ofrece programas de formación profesional en diferentes sectores y en distintos niveles educativos, desde programas de un año de iniciación profesional (parecido a la Formación Profesional Básica española), programas MBO (similar a la Formación Profesional española), programa VAVO (educación de adultos), cursos HBO (educación superior), cursos de holandés e integración (extranjeros) y cursos para trabajadores en activo.

Las enseñanzas de Formación Profesional se desarrollan en 4 cursos académicos. El primer año es el equivalente a nuestra Formación Profesional Básica (ellos le llaman NIVEL 1). Es un curso donde se recibe formación de muchos ámbitos tan distintos como la construcción, la industria automotriz, la logística, el cuidado de personas, la logística y el ensamblaje de piezas en taller y una vez finalizado, el alumnado decide si continuar con un segundo, tercer y cuarto curso en una de las especialidades vistas en primer curso y conseguir así un diploma MBO de esa especialidad o ir al mercado laboral. Cada curso académico se divide en cuatro periodos lectivos de 10 semanas y uno de estos periodos se dedica a prácticas en empresa. Dependiendo del curso académico, estas prácticas se pueden realizar durante el segundo, tercer o cuarto periodo del año. Los cursos MBO ofertados son de Automoción, Construcción e infraestructura. Administración, Diseño y medios, Salud y bienestar, Hostelería, Telecomunicaciones, Logística, Educación y cuidado de niños, Deportes y ejercicio y Mantenimiento y Mecatrónica.

En el centro docente, los alumnos disponen de un docente que tutoriza su formación y que les guía para que pueda tomar una decisión acertada para su desarrollo como profesionales y apoyarles en su desarrollo personal. Mi impresión de lo que percibí es que intentan que sea una educación personalizada y flexible. Disponen de programas específicos para trabajar el acoso en las aulas entre iguales (Rock and Water training), así como, fomentar el talento de los estudiantes (Landscape of talent). También preparan a sus alumnos y alumnas para las competiciones SKILLS nacionales de los distintos estudios de Formación Profesional como hacemos en España.

Yo he notado que existe una colaboración muy estrecha entre empresa e institución educativa para que los alumnos realicen sus prácticas y con proyectos de innovación y desarrollo realizados conjuntamente. Es más, parte de las instalaciones donde desarrollé mi estancia profesional estaban dotadas con maquinaria de las propias empresas y era usada por sus trabajadores en sus periodos de formación y por los alumnos del Da Vinci College en sus clases prácticas.

Me llamó la atención también el ascenso en los niveles educativos. Una vez finalizada la etapa de educación primaria a los 12 años de edad, el alumnado debe realizar una prueba académica que lo evalúa y sitúa en un nivel de conocimiento que conjuntamente con la evaluación y consejo de los profesores de primaria determina en qué nivel de secundaria, de los tres existentes, deberá proseguir sus estudios, hasta los 16, 17 o 18 años según sea su trayectoria académica. Esto significa que el alumnado, a muy temprana edad, es dirigido hacia el mundo laboral con estudios de formación profesional o hacia la universidad.

La presencia de alumnado femenino en los cursos de especialidades industriales es escasa o nula, a diferencia de los cursos de especialidades como peluquería, cuidados, salud, administración u hostelería donde son mayoría las chicas. Esto también sucede en las aulas españolas.

Asimismo, pude comprobar de primera mano que la competencia lingüística en inglés del alumnado es muy alta. Todos los alumnos con los que compartí espacios y docencia, desde alumnos de primer curso a cuarto curso, hablaban muy bien inglés. El alumnado de los niveles educativos más elevados acredita un nivel de inglés B2 o C1 al finalizar su etapa educativa.

Realicé un completo plan de trabajo cada una de las semanas, y se incluyeron distintas actividades culturales, también, durante el fin de semana con visitas a los molinos de viento de Kinderdijk, Delf, Breda y Rotterdam, así como, la visita a empresas y acompañamiento de profesores en todas sus tareas diarias.

Durante todas estas actividades pude comparar los sistemas educativos de ambos países, especialmente en la asistencia a clases con alumnos. Comprobé que mayoritariamente la metodología de trabajo era APRENDIZAJE POR PROYECTOS con una gran autonomía por parte del alumnado. El uso de plataforma tipo Moodle está extendido en toda la comunidad educativa para intercambio de información y entrega de tareas. La búsqueda de empresa para realizar las prácticas la realizan los propios alumnos en un espacio web que han habilitado las propias empresas y que el alumnado consulta para hacer su propuesta de formación en centros de trabajo a su tutor.

Con respecto al profesorado, observé una diferencia significativa como, por ejemplo, que había profesorado con jornada laboral de 4 días a la semana decidido por ellos mismos y con disminución de salario para conciliar vida laboral-familiar. Como cuerpos docentes, existe el instructor (que equivaldría a nuestro cuerpo técnico) y el profesor (que equivaldría a nuestro cuerpo de secundaria). Ambos con docencia directa con alumnos, pero sólo el que hace las funciones de profesor es responsable también del desarrollo personal del alumnado.

Al desempeñar también un cargo de dirección en mi centro (soy jefa de departamento y coordinadora Erasmus), acudí a numerosas reuniones entre diferentes equipos. Cabe destacar que el director del centro no es un profesor y que los jefes de departamento sólo hacen tareas de gestión.

Algo que me sorprendió bastante, lo presencié en una reunión del jefe de departamento con uno de los estudiantes. En ella, se le ofreció al estudiante un sueldo a cambio de que le dedicara 40 horas a un proyecto que el departamento tenía que finalizar antes de una fecha concreta y que era inviable con las horas disponibles de los profesores. Este sueldo saldría del presupuesto propio del proyecto.

Las cuestiones culturales, las diferentes formas de vida y enfoque en sistemas educativos fueron debatidas en las distintas sesiones con alumnos, profesores y directivos, así como, con familias holandesas por el tipo de alojamiento que elegí para mi estancia, durante la primera semana en un B&B, regentado por el antiguo director del Da Vinci College, y durante la segunda semana en una familia holandesa.

Esta experiencia ha conseguido derribar mi estereotipo del pueblo holandés. Su carácter puede parecer en un primer momento distante, o frío, pero los holandeses tienen un marcado sentido del humor. He notado de primera mano la franqueza y que son muy directos. Muchas de las personas que conocí en el centro sienten pasión por España, conocen lugares más allá de las playas andaluzas e incluso dos de los profesores del centro me contaron que en los próximos meses se trasladaban a España tras vender su casa en Dordrecht para comenzar una nueva vida: una con una empresa creada de alojamientos turísticos en Mijas y otro sin proyecto alguno. Me corroboró este hecho la idea que me mostraron durante estas dos semanas de saber lo que quieren y de su autonomía personal.

El objetivo general de mi estancia profesional, conocer el sistema de Formación Profesional de otro país europeo, en este caso Países Bajos, mediante la participación en la vida de un centro de FP y la observación de la práctica docente, se ha alcanzado sobradamente.

En cuanto a los objetivos específicos, he conseguido comparar los sistemas educativos de ambos países, conocer otras metodologías educativas, valorar rasgos culturales diferentes a los propios, intercambiar buenas prácticas pedagógicas y mejorar mis competencias profesionales y lingüísticas.

He podido comprobar con mi presencia en las aulas y en el centro el trabajo en equipo del alumnado, la relación estrecha con empresas del entorno, que disponen de recursos técnicos similares a los nuestros, que existe un plan de convivencia, que existe un proyecto de centro para alumnos con talento y que sus proyectos europeos se engloban dentro de los programas KA2 y no tanto con movilidades de alumnos y profesores (KA1).

En conclusión, la estancia ha sido sumamente productiva. La flexibilidad y trabajo en equipo que se fomenta en estos modelos educativos son sus puntos positivos.

Sobre Dordrecht, destacar que es una ciudad rica en historia, cultura, naturaleza y diversión, un lugar de bicicletas, de colores, de locos por el queso y con vecinos amables, emprendedores y sonrientes.

Sobre Países Bajos, solo me queda recomendar a todo el mundo su visita, preferiblemente en esta época del año para que las lluvias no os arruinen las visitas culturales, con sus molinos de viento, los tulipanes, el queso gouda, la porcelana de Delft, los zocos de madera, …Los Países Bajos no son un país que deje indiferente a nadie, tiene personalidad ¡y mucha!