Textos didácticos revolucionarios

Fuente: José Fernández Huerta1, Revista de Educación nº 157

Hoy daremos un viaje atrás en el tiempo, remontándonos al año 1963. Gracias a la labor de recuperación que la Revista de Educación está realizando para el acceso digital a todos sus textos, hemos disfrutado de la lectura de este estudio que, aun teniendo un título bastante peculiar, no se refiere a los textos que impregnaron los corazones revolucionarios de la época sino al gran cambio que sufrieron los materiales de enseñanza.IMG-20140730-WA0005

Partiendo de la idea de «enseñanza» como agente conductor social, este artículo refleja cómo los nuevos ideales y necesidades sociales dieron paso a nuevos métodos de trabajo en las aulas y al uso de materiales más funcionales, asentados en siete factores:

  1. El aprendizaje personal, buscando una mayor autonomía y singularidad los tiempos y formas de aprender del alumnado.
  2. La facilitación madurativa, apoyando al estudiante en su proceso de crecimiento.
  3. El incentivo de dominio, presentando textos más atractivos que motivan el afán de superación.
  4. La realización activa, apoyados por cuestiones y/o actividades que hacen del texto un punto de congruencia de un mayor número de factores personales que refuerzan el aprendizaje y la confianza del alumnado en la confrontación con los ejercicios en el aula.
  5. La aproximación iterativa al objetivo final, que no hace sino reforzar la individualidad del aprendizaje.
  6. Formulación proobjetiva y
  7. Confianza autocorrectiva, que proyectan la tendencia a la independencia y autoevaluación del alumnado, presentando la etapa escolar una nueva vertiente de «confianza» en el escolar, nunca vista antes.

IMG-20140730-WA0007Estas claves, reflejo de la sociedad, proyectaron una nueva forma de enseñar que ya no podía acompañarse con los densos textos que se trabajaban en las aulas; es por ello que surgen los textos funcionales. Cinco son las modalidades que expone este autor para clasificar los nuevos textos.

Comenzamos con los libros de trabajo cuyo origen se asienta sobre la creencia en el fracaso de los antiguos textos, de los cuadernos de notas y apuntes, y la esperanza de cambio. La falta de hábito de trabajo y toma de apuntes, la excesiva velocidad de la actuación magistral, etc. llevan al origen de nuestros actuales libros de texto educativos o libros de trabajo, integrados por unidades didácticas.

Debido al alto coste de dichos libros, se planteó un sistema alternativo de fichas de aprendizaje. Diversidad, multiplicidad y adaptación son los pilares que fundamentan un uso flexible a cada vertiente de aprendizaje (desde actividades de inicio al tema hasta especializaciones en diferentes tópicos) y que potencian el trabajo de innumerables procesos como la observación, al análisis o la deducción.

Otros materiales de interés son los libros funcionales de imágenes y los libros filmados que se especializan en el trabajo con material audiovisual pero con una propuesta de actividades que subraya la respuesta del alumnado de una forma conductual abierta pero dejando atrás las simples tareas de visualización e imaginación que se abordaban anteriormente.

Por último, una de las mayores revoluciones para la época y que aún hoy supone gran esfuerzo adaptativo collagepor parte del profesorado, las TIC del 1963: Ingenios y libros programados. El comienzo del uso de las «máquinas educativas» buscando una mayor motivación del alumnado y mayor control de refuerzos y errores.

Tras este paseo por los materiales que revolucionaron las escuelas de los 60’s, cabe analizar cómo han cambiado las clases desde aquel entonces. Libros de texto, fichas, «máquinas», … si nos regimos a los nombres parecemos quedar encapsulados en el tiempo, siendo posible que este artículo presente las claves generales de la organización de la didáctica; pero con un vistazo en profundidad a los ficheros de los maestros vemos que cada avance, cada descubrimiento, cada movimiento social queda reflejado en la enseñanza, y es que no hay mejor máquina del tiempo que los archivos escolares.

 Lorena Pedrajas López (INEE)


[1] JoséFernández Huerta (1917). Pedagogo experimental asturiano. Catedrático de Didáctica en Universidad de Barcelona y en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. Obras: Las pruebas objetivas en la enseñanza primaria, Escritura: Didáctica y escala gráfica, Escala gráfica, y Didáctica General. (Fuente: http://pedagogos.webcindario.com/)