El Monitor de la Educación y la Formación es un informe de la Comisión Europea que recopila los indicadores europeos en materia de educación y formación. Su última edición de 2017 se centra en la desigualdad en la educación y en el importante papel que la educación desempeña para la construcción de una sociedad más justa. Para la elaboración de este informe, se ha utilizado como fuente principal de datos la prueba PISA 2015, realizada a alumnos de 15 años de edad, en la que por primera vez han participado todos los Estados miembros de la UE.
Con respecto a los principales hitos que aborda, cabe destacar la consulta que está llevando a cabo el Parlamento español para conseguir un Pacto de Estado Social y Político por la Educación que establezca las bases de una reforma de la educación y de la profesión docente. Por otro lado, el informe demuestra cómo se ha reducido gradualmente el índice de abandono escolar prematuro, mientras que el rendimiento de los alumnos en las competencias básicas que se miden en PISA 2015 se mantiene estable, situándose en torno a la media de la UE. Asimismo, sus datos arrojan que la oferta educativa en educación superior sigue siendo bastante extensa aunque la matriculación se haya reducido con respecto a 2013. Por último, se resaltan la labor del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para prevenir la violencia y el acoso en las escuelas.
En referencia a los principales indicadores que se consideran en Monitor, resaltan el porcentaje de personas que abandonan tempranamente la educación y la formación entre 18 y 24 años en España, que se sitúa en el 19,0% en 2016, existiendo diferencias significativas entre sexos ya que, en el caso de los hombres es del 22,7% y en el de las mujeres es del 15,1%. Aunque este dato es superior a la media de la UE, que se sitúa en 10,7%, se ha producido un descenso respecto a 2013, cuando se estableció en 23,6%. Por otro lado, el porcentaje de titulados en educación terciaria entre 30 y 34 años en España es del 40,1% en 2016, un dato similar al obtenido de la media de la UE que es del 39,1% e inferior al 42,3% que resultó en 2013. Por último, la tasa de empleo de los graduados recientes por nivel educativo alcanzado en España se sitúa en el 68,0% en 2016, lo que supone un aumento de ocho puntos porcentuales respecto a 2013 (59,9%). Sin embargo, esta cifra sigue siendo inferior al 78,2% que se obtiene de la media de la UE. Así, los datos que nos aporta el informe Monitor de la Educación y la Formación reflejan una tendencia de mejora en los resultados de los españoles, al tiempo que nos señala las materias que deben trabajarse para acercarnos más al promedio europeo.
