PISA, el Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos, pone de manifiesto que, en el periodo transcurrido entre 2006 y 2015, en cuyas ediciones se preguntó a los estudiantes sobre su conocimiento de los problemas medioambientales de nuestro planeta, los jóvenes han desarrollado una mayor conciencia de los mismos al tiempo que un mayor pesimismo.
Así, en promedio, mientras que en 2006 el 57% de los estudiantes de los países de la OCDE declaró estar informado sobre aspectos como el aumento del efecto invernadero y la modificación genética, en 2015 esta cifra alcanzó el 64%. Por otra parte, el 43% de los alumnos que en 2015 declaró conocer el aumento del efecto invernadero expresó a su vez que este problema empeoraría durante las próximas dos décadas.
Figura 1. Evolución de la conciencia medioambiental y el optimismo
El incremento en esta conciencia aumentó en países como Israel, Méjico, Portugal, Turquía, Qatar, Túnez e Indonesia, mientras que en otros países descendió, a saber, Chequia, Austria, Italia, Japón y Países Bajos.
Sin embargo, en promedio, en los países OCDE el porcentaje de alumnos que declaró sentirse optimista a propósito del futuro de nuestro planeta se mantuvo estable. Por una parte, entre 2006 y 2015 creció mínimamente el optimismo a propósito de la deforestación, los residuos nucleares y la contaminación del aire; por otra, sin embargo, aumentó el pesimismo en relación con las reservas de agua. El optimismo creció en Estonia, Japón y Países Bajos, mientras que descendió en Bulgaria, Chile, República Checa, Hong Kong, Corea, Taiwán y Turquía.
Figura 2. Pesimismo en relación con los problemas medioambientales
Por último, en promedio, los estudiantes de los países OCDE que declararon tener una mayor conciencia medioambiental tienen múltiples características en común. Por ejemplo, aquellos estudiantes de entornos socioeconómicos aventajados manifestaron ser más conscientes de los problemas medioambientales que los más desaventajados. Por otra parte, aquellos estudiantes que participan en actividades científicas, que desean cursar carreras científicas o que están expuestos a una enseñanza basada en la investigación, también poseen una mayor conciencia medioambiental.
Figura 3. Conciencia y optimisto medioambiental
Para más información, consultar el boletín PISA in Focus n.º 87 de la OCDE
