Estancia profesional en Rathmines College of Further Education en Dublín (Irlanda)

La estancia se ha desarrollado desde el 8 de abril hasta el día 19 del mismo mes. RathminesCollege of Further Education es un centro de enseñanza ubicado en Dublín (Irlanda), que imparte enseñanzas profesionales de nivel 4, 5 y 6, más o menos equivalentes a lo que en España son los ciclos de iniciación, grados medios y grados superiores. Aparte, en el horario de tarde se realizan actividades de ocio (como yoga)  así como formación en micro competencias (manejo de hoja de cálculo, enseñanzas iniciales de idiomas…).

El número total de alumnos para todos los niveles, reglados o no, se acerca a los 1.000 estudiantes. De ellos una parte son alumnos de nivel académico alto que tienen como principal objetivo el acceso a la universidad, tras el paso previo por una enseñanza que aparte de la cualificación profesional, les aporta más puntos para la carrera elegida o, incluso, les hace que puedan convalidar el primer año universitario

Otra parte son alumnos de iniciación profesional, gran parte de ellos enviados por los servicios de empleo o los servicios sociales. A diferencia de lo que sucede en España, los trabajadores en desempleo o percibiendo rentas de inserción social, reciben la formación necesaria para su inserción en centros públicos.

Aparte de todo esto hay una oferta de formación no académica que se asemeja a lo que en España se ofrece por las universidades populares de titularidad municipal, que se diseña con la misma idea de que las personas que no tienen interés especial en las certificaciones, puedan mejorar destrezas y competencias de un modo fundamentalmente lúdico.

La integración en las actividades del centro fue plena. Por ello, a mi llegada me fue facilitado un horario con las horas de permanencia en el centro y cómo se distribuían la presencia en clase, con entrevistas al profesorado y personal del centro.

El modelo de funcionamiento del collegepropició el intercambio de ideas y de visiones sobre muchas cuestiones sociales con parte del profesorado del centro. La sala de profesores es el eje central de la convivencia en el centro, pues los profesores no se agrupan en departamentos didácticos.Allí es donde se tratan todos los asuntos, desde cuestiones personales a las relacionadas con el trabajo docente.

He de señalar que algunos profesores me tendieron puentes desde el principio para que fuera hablando con ellos, desde temas más intrascendentes hasta otros que fueron haciéndose más complejos con el paso de los días.

Además de a clases, entrevistas con profesorado y profesionales del centro o asistencia a un claustro, pude asistir a un evento que se organizó para estimular la convivencia entre profesorado y alumnado. El centro promueve actividades que permiten la relación sin barreras entre los alumnos y sus profesores. Una de estas actividades fue la organización de un “karaoke”, celebrado en la sala principal del college, donde participaron profesores, con un repertorio más clásico, mientras que los alumnos cantaban temas más modernos como rap. Pero lo importante no era la competencia musical, sino el hecho de compartir espacio y unas pizzas en igualdad de posición, sin que alguien tenga más autoridad que los otros.

Sobre recursos tecnológicos que me llamaron la atención, diré quela dotación informática de todas las aulas ha sido diseñada con recursos para que puedan ser utilizadas por el profesorado en enseñanza a distancia en hipotéticas situaciones de cierre escolar, como la que se vivió durante el confinamiento por covid. Cada clase tiene pantallas y cámaras para que cada profesor pueda hacer su clase, de modo que llegue por videoconferencia a su alumnado.

Los colleges son un centro separado de los centros de educación secundaria y tiene un régimen de funcionamiento y organización completamente distinto, algo que supone una diferencia importante respecto a España.

En muchos aspectos el college se parece a la educación superior, con puertas abiertas en el centro y las aulas, sin toque de timbre a cada cambio de clase y con menor preocupación por aspectos disciplinarios como el uso del teléfono móvil en clase o en el comportamiento del alumno, que se presupone con la responsabilidad propia de su edad. Esto también repercute en un profesorado con menor carga burocrática que la observada en España.

Dicho esto resulta ilustrativo conocer el funcionamiento del sistema educativo y el país al que va anclado, pues los dos aspectos deben considerarse entrelazados. Por esto, he tratado además de conocer la actualidad del país leyendo la prensa irlandesa a diario, así como visitando las principales instituciones culturales, museos y exposiciones.

La estancia ha culminado el esfuerzo personal previo que comenzó hace más de un año, buscando un centro de enseñanza idóneo. Luego ha sido preciso superar otros obstáculos, como los económicos, pues se trata de una ciudad con uno de los más elevados costes de alojamiento del mundo, lo que requiere administrar al milímetro tanto la ayuda del Ministerio, como los recursos económicos propios empleados.

Respecto a obstáculos de integración en un centro educativo desconocido y en tan poco tiempo, solo tengo buenas palabras para todas las personas que trabajan en el centro de destino, no solo el equipo directivo o el profesorado, sino también el personal de administración y de consejería.

Concluyendo, para mí ha sido una experiencia muy positiva y enriquecedora, que ha sido posible con los recursos personales y humanos del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes, la Consejería de Educación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y RathminesCollege of FurtherEducation, de Dublín.

 

Julio Olmedo, profesor de Formación y Orientación Laboral en IES Francisco García Pavón, Tomelloso.