Experiencia en el Lycée Félix Le Dantec de Lannion (Francia)

Hola, soy Mª José, profesora de Francés en el IES Manzanedo de Santoña, Cantabria. He obtenido una estancia profesional de 15 días en el Lycée Félix Le Dantec de Lannion (Bretaña, Francia) y me gustaría comentar algunos puntos que me han llamado más la atención:

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En primer lugar me sorprendió el tamaño del Centro (lycée de 2100 alumnos, a partir de 4º de ESO), que ofrece las ramas generales de bachillerato así como las tecnológicas, además de otras enseñanzas profesionales, tanto para alumnos que no han pasado la ESO como para los que quieren una mayor especialización tras el Bachillerato, Módulos de grado superior variados e internado de chicos y de chicas para aquellos que viven más alejados.

El gran trabajo de organización y de oferta educativa se lleva a cabo por un equipo directivo que está profesionalizado y que ha pasado una oposición para desempeñar dichos cargos, lo que quizás le pueda dar más eficacia, pero también lo hace más jerárquico y, en algunos casos, más distante del profesorado.
Este equipo directivo está acompañado en su tarea por una consejera de orientación psicológica (no docente), que realiza las tareas de asesoramiento y que sirve de lazo entre los alumnos, padres y profesores en el acompañamiento escolar de los alumnos. Los alumnos, en general, no repiten curso, sino que se les va orientando de manera que elijan los estudios que más se adapten a sus inquietudes y cualidades.

En colaboración con el profesorado y el equipo directivo trabaja el departamento de “Vie Scolaire” que se ocupa de la organización de la vida colectiva fuera del tiempo de clase (porque los alumnos pueden tener huecos en su horario). De esta manera, controlan las faltas de asistencia del alumnado, cubren las ausencias del profesorado con un amplio equipo de vigilantes (“surveillants”, jóvenes empleados contratados) y forman a los delegados de clase para sus funciones. Trabajan en estrecha relación con los profesores y los tutores cuando se trata del comportamiento o del trabajo de los alumnos para buscar soluciones y remediar las dificultades (y con la enfermera y la asistente social, si es el caso), asisten a las evaluaciones (así como el delegado de clase y representante de las familias) y ayudan a la organización del tiempo de ocio (porque los alumnos comen en el comedor), en colaboración con los profesores interesados, para la creación de talleres o realización de actividades o proyectos.
Este departamento me ha parecido muy interesante porque no son los profesores los que hacen las guardias y no son los tutores los que llevan el control de faltas, aunque entre todos hacen el seguimiento del alumnado. Además los alumnos tienen la posibilidad de hacer otras actividades fuera de las puramente académicas. Hay que decir en este punto que el horario de clases es de mañana y tarde (a veces hasta las 17h).

cdiA destacar también está el funcionamiento del CDI o Centro de Documentación (Biblioteca), abierto todo el día y dirigido por bibliotecarios que se ocupan, además del préstamo de todo tipo de material (incluido el tecnológico), del asesoramiento de los alumnos y profesores en sus trabajos y en la realización de actividades de animación a la lectura.

En definitiva, esta estancia me ha parecido de sumo interés, no sólo por la observación del trabajo docente y por la práctica del idioma, sino también por conocer otro tipo de funcionamiento interno que, aparentemente, produce menos fracaso escolar, más motivación en el trabajo y mejor convivencia.

Imágenes: Mª José Gómez