Estancias Profesionales

En la presente convocatoria del programa de estancias profesionales he tenido la suerte de disfrutar de una de ellas en el centro Castleknock College, de Dublín (Irlanda). Se trata de un centro católico fundado en 1835 por la Congregación Vicenciana y que goza de un gran prestigio en la capital irlandesa por su calidad educativa, sus instalaciones y los resultados obtenidos por sus alumnos en el Leaving Certificate (prueba de acceso a la universidad). Es un centro que cuenta con financiación mixta, tanto estatal como la obtenida a partir de las matrículas cuantiosas que pagan las familias de los alumnos cada curso, lo que le permite disponer de los fondos suficientes para poder ofrecer unas fantásticas instalaciones, así como suficiente profesorado para que la ratio en los grupos no sea elevada.

Como características diferenciales del centro destacaría la importancia que se le concede a dos aspectos. Por un lado, la música, contando con un claustro de músicos profesionales y especialistas en la materia que despiertan la pasión por la educación musical entre los alumnos, a través de diferentes coros y bandas formadas por los propios estudiantes, que también preparan un musical cada año. Por otro lado, en el centro se le concede mucha importancia al deporte y en particular al rugby, y para ello cuenta con unas instalaciones envidiables. A través de estos dos aspectos intentan transmitir valores como el trabajo en equipo, o la importancia del esfuerzo

Otro rasgo del centro que considero muy importante y que me llamó la atención fue la actitud y el comportamiento en general del alumnado, ya que en general eran muy trabajadores en clase y bastante autónomos, y tenían un trato muy educado con los profesores. Este hecho permitía que se aprovecharan muy bien las sesiones de clase, ya que desde el comienzo de la clase los alumnos estaban sentados y preparados con el material y durante la hora había un ambiente adecuado de trabajo, y no era necesario perder tiempo corrigiendo el comportamiento. No obstante, el ambiente en las clases solía ser relajado y había un trato muy educado pero a la vez cercano entre los estudiantes y sus profesores

En cuanto a la organización del centro, en este caso, eran los alumnos los que se movían cada hora de un aula a otra, y cada profesor solía tener su propia aula de la asignatura correspondiente, lo que le permitía tener a mano todos los recursos necesarios y decorar el aula con numerosos recursos visuales como tipografías, esquemas o posters de la asignatura, así como los trabajos elaborados por los propios alumnos.

Por otra parte, en el college irlandés utilizaban mucho los recursos TIC, tanto los profesores para impartir sus clases como el alumnado en su trabajo personal. Los docentes disponían de una tableta gráfica conectada por bluetooth al proyector que utilizaban muy a menudo (especialmente los profesores del área de ciencias)  para ir escribiendo sobre ella, en lugar de sobre la pizarra, e ir mostrando al alumnado el libro de texto digital, el solucionario, y diferentes recursos. A su vez, este material escrito por el profesor en cada clase se quedaba automáticamente grabado y se subía junto a numerosos recursos complementarios a la plataforma Microsoft Teams, en la que el alumno podía consultarlo.

En relación al sistema educativo irlandés, hay ciertas diferencias con el nuestro, ya que en Irlanda, el equivalente a 4º ESO sería el Transition Year, que no se centra tanto en los contenidos, sino en otros aspectos complementarios, como por ejemplo competencias personales. Por otra parte, ya desde el primero de los dos años del equivalente a nuestro bachillerato, quizás se enfocan más las asignaturas a la preparación del Leaving Certificate, haciendo referencia a él con mucha frecuencia y dando orientaciones sobre cómo responder a las diferentes cuestiones que puedan aparecer en ella.

Durante mi estancia he tenido la oportunidad de observar sesiones de clase de varias asignaturas diferentes y de diferentes profesores, aunque fundamentalmente me he centrado en mi asignatura, matemáticas y en castellano como lengua extranjera. En la asignatura de matemáticas he asistido a clases de varios profesores distintos del departamento y en diferentes niveles de Junior Cycle (ESO) y Senior Cycle (bachillerato). Asimismo, he tenido la ocasión de asistir a clases de dos materias que no tenemos en España, como Applied Maths, en bachillerato (centrada en aplicaciones de las matemáticas al mundo real y problemas físicos) y CBA, en la que los estudiantes de cursos inferiores elaboraban un proyecto de investigación de un aspecto de la vida diaria en el que aplicaban los contenidos matemáticos. Por otra parte, en castellano, he colaborado en clase fundamentalmente ayudando a los alumnos a preparar la prueba oral de español en el Leaving Cert.

Adicionalmente, aparte de las clases ordinarias, también participé en otras actividades, como un claustro de profesorado, o colaborando en actividades deportivas con el alumnado o actividades lúdicas y de animación a la lectura.

Además de lo anterior, con vistas al curso que viene, con el departamento de español del college, se ha planteado la posibilidad de realizar actividades compartidas en algunos grupos entre el alumnado español e irlandés. Y posiblemente otro docente de mi centro tenga también la oportunidad de realizar una estancia profesional en el centro irlandés, lo que ayudaría aún más a reforzar la relación entre ambos centros.

En general, ha sido una experiencia muy enriquecedora, tanto a nivel profesional, como personal, que me ha permitido sumergirme en la vida del centro, y conocer otro entorno educativo diferente, y poder observar otros recursos y metodologías docentes