Estancia profesional en De Witte Olifant Openbare Bassisschool en Ámsterdam(Países Bajos)

Mi nombre es María del Mar Peña Marín y mi estancia docente ha tenido lugar en Ámsterdam (Países Bajos) en el periodo comprendido del 15 al 26 de enero de 2024.

El centro de acogida De Witte Olifant está ubicado en Ámsterdam, la capital de Países Bajos. Se encuentra en pleno centro de la ciudad, concretamente en el barrio de Uilenburger. 

De Witte Olifant es un centro que cuenta con clases de Educación Infantil y Primaria, habiendo una clase por nivel mayormente. Cada clase cuenta con una ratio de unos 25 alumnos/as, aunque también hay clases que tienen un número menor. Hay un tutor/a para cada una de ellas, así como docentes para impartir idiomas, educación física y refuerzo educativo, lo que hace un total de 20 profesores. Hay un gran número de alumnado que viene de otros países, como India, Malasia, Alemania, Ucrania, Perú, entre otros. 

En general, todos muestran un gran respeto hacia el profesorado, tanto en su comportamiento, como en la forma de dirigirse a los distintos docentes, todos los alumnos/as dan la mano y saludan cuando llegan a clase, al igual que cuando se marchan a casa. El horario es de 8.30h- 15.00h todos los días (teniendo un descanso de una hora para almorzar), excepto  los miércoles, cuyo horario es de 8.30h-12.30h. Al llegar a clase, el alumnado tiene detallado minuciosamente todas las actividades que se van a realizar durante el día, aunque se trabaja de forma muy rutinaria, hecho que implica que los niños/as sean muy autónomos. Los docentes sólo trabajan con pizarra digital.

Durante la jornada escolar, siempre se trabajan actividades relacionadas con la expresión oral y los valores, para que el alumnado sepa expresarse con claridad y para prevenir problemas como el acoso escolar. 

Durante las dos semanas en De Witte Olifant, observé varias diferencias entre el sistema educativo en el que trabajo, el español, y el que estaba inmersa, el holandés. 

Para comenzar, los niños tienen un planning semanal de tareas que tienen que realizar en clase de forma autónoma y entregar al finalizar cada viernes, el docente es sólo un guía del aprendizaje en muchos momentos. También, hay que descatar, que el alumnado no tiene deberes para casa, todos los contenidos dados se repasan y afianzan en el colegio, no en casa. Los libros de los estudiantes son tipo ‘workbook’, por lo que el alumnado se centra en contestar a las actividades y  cuestiones que tienen que completar, no pierden el tiempo en copiar las actividades de clase, otra diferencia es el momento de salir al patio, ellos no tienen patio propio, acuden a un parque cercano que ha sido habilitado por el ayuntamiento, y lo más importante es el gran respeto que tienen hacia al profesorado.

En estas semanas, el profesorado me ha comentado que la figura del maestro/a está perdiendo relevancia en la sociedad, ya que es una profesión que no está bien remunerada, se trabaja muchas horas y comienza a tener mucha carga burocrática, por esta razón hay escasez de docentes.

Con respecto a las tutorías, sólo hablan con las familias de forma general (reunión de familias) tres veces al año, una al comienzo del curso escolar, otra en el segundo trimestre para conocer la evolución del alumnado y una final para hacer un balance del curso. No existen las tutorías como en España, tan sólo hacen llamadas por teléfono si es necesario. Las familias confían en el trabajo del profesorado, por lo que no tienen tutorías todos los lunes del curso académico, sino que sólo se realiza una reunión general en cada trimestre.

En el momento de evaluar, se tiene muy en cuenta el trabajo diario, y los exámenes se realizan sin llevar los libros a casa, por lo que se califica los conocimientos que el alumnado ha aprendido en clase, no someten al alumnado a un estrés constante de ser examinado en las diferentes áreas tema por tema.

La distribución horaria es otro elemento característico de la organización pedagógica de las escuelas holandesas. La mayoría de las clases tienen una duración de 30- 45 minutos hecho que beneficia el aprovechamiento de las diferentes tareas, teniendo entre estos tramos descansos activos como bailes, pequeños juegos, vídeos lúdicos con datos de interés.

La experiencia ha sido muy enriquecedora, ya que te da otra visión totalmente distinta de lo que puede ser la enseñanza. Ámsterdam es una ciudad en la que conviven más de 180 nacionalidades distintas, donde la mitad de sus habitantes son extranjeros y se respira un ambiente en el que todo el mundo es bienvenido, esta acogida se traslada también a las aulas, por lo que los niños/as son muy tolerantes, respetuosos y muestran muchísima empatía. Conocer cómo se desarrolla tu profesión en otro lugar del mundo es muy importante.